En Chile es el Estado quién paga la mayor parte de las pensiones a través del denominado «pilar solidario», que alcanza a 200 dólares mensuales aproximadamente, con dineros que provienen principalmente del IVA, un impuesto regresivo, que resulta más gravoso a los más pobres.
En 1978, en plena dictadura de Pinochet, se crearon las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), un negocio que hoy está en manos de aseguradoras trasnacionales, y que con la excusa de pagar pensiones (aunque solo lo hacen marginalmente), entrega miles de millones de dólares a accionistas de trasnacionales, de todo el mundo, para que inviertan y lucren en el mercado financiero.
Mientras, en Chile, se pagan pensiones de hambre y el gobierno socialdemócrata de Boric impide que los ahorrantes podamos retirar nuestro dinero, beneficiando a las AFP.
Las AFP son un negocio fraudulento que solo se sostiene por el dinero lobbista que pagan a los políticos, de derecha e izquierda.
Hoy, más que nunca, en un escenario de estanflación, sin crecimiento y con una alta inflación, l@s trabajador@s necesitamos recurrir a nuestros ahorros.
¡Ni Estatal ni privado!
¡Por un sistema de seguridad social en manos de l@s trabajador@s!
¡No más AFP!
¡Revolución social y comunismo anárquico!
(anicetohevia@riseup.net)